La danza desempeña un papel fundamental en la vida de las mujeres, ya que les brinda la oportunidad de expresarse, fortalecer su autoestima, mantener una vida activa y saludable, y hacer frente a los desafíos físicos y emocionales que enfrentan a lo largo de su vida.
En primer lugar, la danza permite a las mujeres expresar sus emociones y sentimientos de una manera única. A través del movimiento y la música, pueden transmitir y comunicar mensajes, experiencias y vivencias. Esto les permite conectarse con su interior, liberar tensiones y encontrar una forma de comunicación sin palabras.
Además, la danza también tiene un impacto significativo en la autoestima de las mujeres. A medida que aprenden nuevas técnicas y se desarrollan en el arte de la danza, se sienten más seguras de sí mismas y aprecian su propio cuerpo y habilidades. Esto les brinda no solo confianza en el ámbito de la danza, sino también en otros aspectos de su vida.
La danza también ofrece una forma divertida y efectiva de mantenerse activas y saludables. A través de la práctica regular, las mujeres pueden mejorar su condición física, desarrollar fuerza, flexibilidad y resistencia, así como mantener un peso saludable. Además, la danza también ayuda a mejorar la coordinación, el equilibrio y la postura, lo que es beneficioso para prevenir lesiones y mantener una buena salud en general.
Por último, la danza ofrece a las mujeres la oportunidad de enfrentar y superar desafíos tanto físicos como emocionales. A medida que se enfrentan a coreografías complicadas, a la necesidad de trabajar en equipo con otras bailarinas y a la presión de actuar en el escenario, las mujeres aprenden a ser perseverantes, disciplinadas y a gestionar el estrés. Estas habilidades son transferibles a otros aspectos de la vida, como el trabajo y las relaciones personales.
En conclusión, la danza juega un papel fundamental en la vida de las mujeres, proporcionándoles una forma de expresión, fortalecimiento personal, una vida activa y saludable, y la capacidad de enfrentar y superar desafíos. Por lo tanto, es importante valorar y apoyar el arte de la danza, así como promover su práctica entre las mujeres de todas las edades.
Gracias al proyecto Capaciades Diversas de la entidad Frecuencia se logró que las mujeres practiquen danzas tradicionales y un poco de contemporáneas al mismo tiempo, ya que son personas impregnadas de la cultura televisiva, acercarlos a otro tipo de contextos por medio del movimiento y el folclor es un avance importante.
La danza y el movimiento les genera una serie de capacidades grupales e individuales, explorando su cuerpo con relación al espacio y obligándose a seguir indicaciones, memorizar y a seguir patrones rítmicos
Se logró fortalecer el trabajo grupal y la solidaridad entre ellas creando un clima de trabajo y cooperación con enfoque en obtener resultados positivos